El estado nutricional en pacientes en hemodiálisis (HD) puede evaluarse mediante diferentes instrumentos, entre estos el análisis de impedancia bioeléctrica (BIA). El ángulo de fase (PhA), obtenido a través de BIA, ha sido reconocido como un marcador que refleja el estado nutricional y tiene un valor pronóstico significativo en la sobrevida en pacientes con enfermedad renal crónica. Además, la HD ha sido relacionada con mayor incidencia de sarcopenia, que es una condición caracterizada por la pérdida de masa muscular y fuerza funcional. La prevalencia de sarcopenia en pacientes en HD varía entre el 20 al 55 %, y la presencia de esta se ha asociado con un mayor riesgo de mortalidad en estos pacientes.
En un estudio* realizado en el Hospital de Changwon, Corea del Sur, se evaluó el PhA como predictor de supervivencia en 191 pacientes que iniciaron HD; quienes fueron seguidos durante 38 meses, se analizaron antecedentes clínicos, variables bioquímicas y la composición corporal con InBody S10. Los pacientes fueron clasificados en dos grupos de acuerdo con los valores de PhA: > 4° y ≤ 4°. Además, en esta investigación se definió a la sarcopenia como masa muscular esquelética apendicular < 20 kg en hombres y <15 kg en mujeres.
Los resultados mostraron que los pacientes con valores de PhA ≤ 4° eran de mayor edad, presentaban niveles más bajos de albúmina, colesterol, ácido úrico y fósforo, y tenían mayor incidencia de enfermedad arterial coronaria en comparación con aquellos con valores mayores de PhA. Se identificaron asociaciones significativas entre el PhA y parámetros como índice de masa corporal (p = 0.005), albúmina (p = 0.001) y creatinina (p < 0.001). Durante el seguimiento, el 14.1 % de los pacientes experimentó eventos cardiovasculares adversos graves y el 11.0 % falleció. Respecto a la supervivencia, en los pacientes con PhA > 4° fue significativamente mayor, independientemente de la presencia de sarcopenia. El PhA fue un factor independiente en la predicción de mortalidad en pacientes con HD.
En conclusión, el PhA es un factor pronóstico clave para la supervivencia en pacientes con HD y, la inclusión de este párametro en el seguimiento clínico podría ayudar a los médicos a identificar a pacientes en mayor riesgo, permitiendo ajustar los tratamientos para mejorar su calidad de vida y sobrevida.